Contenido
TogglePor qué la diversificación es clave
Diversificar no es otra cosa que no poner todos los huevos en la misma cesta.
Cuando repartes tu dinero entre diferentes activos, reduces el riesgo de que una mala inversión arruine tus resultados.
Piensa así: si una empresa o activo baja, otro puede subir.
El objetivo no es ganar más rápido, sino no perder todo de golpe. Yo le insisto siempre a mis alumnos.
Moraleja: la diversificación no busca velocidad, busca supervivencia.

Cuántos activos necesitas al empezar
Si estás empezando, la mayoría de expertos recomienda entre 3 y 5 activos.
Pero mi experiencia me dice que puedes llegar a 10 posiciones pequeñas para aprender más rápido sin asumir grandes riesgos.
Ejemplo simple cuando inviertes en acciones
- 10 % en cada operación.
Ejemplo simple en todas tus inversiones
- 50% en indexados globales
- 30 % en acciones siguiendo la diversificación del ejemplo anterior (unos 10 activos)
- 10 % en un ETF de Oro
- 10% en un ETF de Criptomonedas
- 10% en un ETF temático o mercados emergentes.
🎯 Consejo Sweet: no te obsesiones con encontrar “la combinación perfecta”. Lo importante es empezar con cantidades pequeñas y aprender cómo reacciona el mercado.
Cómo elegir los activos adecuados
1️⃣ Entiende qué estás comprando
No inviertas en nada que no puedas explicar con tus propias palabras.
Empieza por empresas o fondos que conozcas y cuyos productos uses.
2️⃣ Revisa el historial y la estabilidad
Mira si el activo ha sobrevivido a crisis pasadas y cómo se ha comportado.
No necesitas que crezca cada mes, sino que resista bien los bajones.
3️⃣ Valora comisiones y facilidad de acceso
Busca brokers que te permitan invertir pequeñas cantidades y tengan comisiones bajas o cero.
Las comisiones son el enemigo silencioso del principiante.

Cómo mantener tu cartera viva
Crear una cartera no es un evento único, es un proceso.
Cada mes o trimestre deberías:
- Revisar tus resultados (y anotar aprendizajes)
- Ajustar el peso de tus activos si alguno creció o cayó demasiado
- Mantener una parte líquida para nuevas oportunidades
Tip: dedica una hora al mes a revisar tu cartera. Es más que suficiente para mantener el control sin caer en la obsesión diaria.
Errores comunes al diversificar
❌ Invertir en muchos activos sin entenderlos
❌ Comprar todo del mismo tipo (por ejemplo, solo acciones tecnológicas)
❌ No revisar nunca los resultados
❌ Querer hacerlo “perfecto” antes de empezar
Recuerda: la mejor cartera no es la perfecta, sino la que está en marcha.

Ejemplo real: mi primera cartera rentable
Cuando empecé, tenía una estructura muy simple:
- 40 % en fondos indexados globales
- 30 % en acciones de grandes empresas
- 20 % en ETFs sectoriales o mercados emergentes
- 10 % en efectivo
Ese enfoque me permitió lograr un +37 % en mi primera etapa real, aplicando un sistema de gestión de riesgo máximo del 1 % por operación. Pero ojo, esa rentabilidad la he obtenido invirtiendo en acciones
Siguiente paso: aprende con mi caso +37 %
Si quieres ver cómo apliqué este sistema paso a paso —sin fórmulas raras ni lenguaje técnico— puedes acceder gratis a mi caso de estudio real (+37 %).
Ahí te enseño cómo diversifiqué mi primera cartera, qué errores cometí y cómo los corregí.
Descubre el caso real donde aplico este enfoque y obtuve un +37 %: estrategia, errores y gráficos paso a paso. Si no estás listo para comprar, podrás suscribirte a la newsletter y seguir aprendiendo conmigo.
Ver mi caso real +37 % y aprende cómo lo hiceFAQ
¿Qué pasa si invierto poco dinero?
Nada. Lo importante no es cuánto inviertes, sino que empieces a aprender cómo se comportan tus activos. Cómo invertir con poco dinero
¿Cuántos activos son demasiados?
Más de 15 para un principiante puede volverse difícil de gestionar. Mejor empezar simple y disponer de pocos activos, y entender bien qué estás haciendo.
¿Cada cuánto debo revisar mi cartera?
Una vez al mes o al trimestre es suficiente. No necesitas mirar el mercado todos los días, siempre que estés invirtiendo en fondos o ETFs, es decir, inversión pasiva. Cuando quieres invertir en acciones, la cosa cambia.
Conclusión
Crear tu primera cartera diversificada no es complicado:
es cuestión de repartir, observar y ajustar.
La consistencia pesa más que la suerte.
Empieza pequeño, aprende rápido y deja que el tiempo y el interés compuesto hagan su parte.